"El Último Beso" (One-Shot)

Disclaimer: Los personajes y lugares no son de mi invención, pertenecen todos a Stephenie Meyer



El Último Beso



La vida, en ocasiones, puede ser dura, cruel, triste y deprimente. En otras, puede resultar alegre, feliz, bella y placentera. Pero por desgracia, el dolor que provoca la muerte de una persona a la que amas tanto; que incluso darías tu vida por ella, convierte nuestra existencia en algo gris y solitario, en un negro y profundo abismo del que no podemos escapar. Convierte nuestra existencia en algo que queremos TERMINAR CON LOCURA.


Tenía el corazón destrozado, quería huir, quería correr y correr hasta que llegara a un punto infinito donde nadie supiera de mí, donde sólo estuviera yo, y la culpa y el dolor no me persiguieran.
Pero solamente era el cuerpo de ella, que había aferrado al mío, el que me obligaba a permanecer en ese lugar oscuro y húmedo donde la luz apenas ya entraba. En aquel horrendo lugar donde mi vida, si es que se le podía llamar así a esta deprimente eternidad, se había venido abajo y la de ella había sucumbido.
Ya no quería nada, tan sólo quería encontrar la forma de acabar con este sufrimiento, maldecía el día en que Carlisle me había convertido en la bestia que soy, en este monstruo inmortal.
Si no hubiera sido por mi culpa ella seguiría con vida, sus castaños ojos seguirían llenos de ese brillo que antes tanto me gustaba, ya no escucharía más el látido de su corazón. ¡¡¡Y TODO POR MI CULPA!!!
Por una vez, sólo por una vez, me arrepentí de no haber cedido a su petición, de no haberla convertido en lo que soy yo: un vampiro. Si hubiera hecho eso, ella se hubiera salvado, pero siempre le había dicho lo mismo cada vez que ella me lo pedía. Si la hubiera convertido en lo que yo soy, ella estaría aquí conmigo.
La abracé con fuerza, a pesar de que sabía que no podría sentir una vez más el calor de su cuerpo, ni el exquisito olor de su sangre.
-No, no, no. Tú no puedes estar... muerta- susurré, mientras mis pálidos dedos acariciaban su rostro, sin expresión alguna.
Mi alma, si es que aún tenía, se oscureció del profundo odio que me embargo cuando pensé en la causante de su muerte. Victoria había logrado su objetivo, y yo no había logrado protegerla (N/A: no a victoria).
Mis ojos bajaron a los pálidos labios de ella, me acerqué lentamente, hasta que mis labios rozaron con los suyos.
-Te amaba demasiado como para condenarte el resto de la eternidad- susurré -y no sabes cómo me arrepiento por no haber hecho eso-
Besé los fríos labios de Isabella Swan, porque en realidad, sería la última vez que lo hacía. Éste sería nuestro último beso.
La cargué en mis brazos, dispuesto a irme de aquel oscuro bosque donde su vida había terminado de la forma más ruín y tenebrosa.
Tenía que buscar una forma de explicarle todo a Charlie....
Otra idea pasó por mi cabeza, sepultaría a Bella en nuestro prado. Todos en Forks pensarían que nos habíamos fugado, pero sólo yo sabría lo que en realida había pasado...
Corrí hacia el prado con todas mis fuerzas, lleno de furia y dolor. El sólo pensar que ya no volvería a besarla, ni a verla sonreír...
Quise ir detrás de Victoria para despedazarla yo mismo, pero no podía en ese momento.
Llegué al prado, cuando lo hice, caminé lentamente, como si en realidad quisiera dejar de hacerlo. Antes de pensarlo, me encontraba a la mitad del prado, ya nada se podía hacer.
Cabé furiosamente en el suelo, intenté ignorar el dolor cuando recordé que ese sería el lugar donde estaría su cuerpo.
Antes de pensarlo, había cavado un agujero lo bastante grande para que ella cupiera lo bastante bien. Me detuve, quería retrasar ese momento lo más que pudiera, pero aunque lo quisiera, no era correcto...
No lo soporté más, volví al lado del cuerpo inerte de ella y lo levanté en mis brazos mientras volvía, de nuevo, a ese oscuro agujero. Deposité su cuerpo lenta y delicadamente. Intenté retrasar ese momento lo más que pude, quería recordar su rostro por el resto de la eternidad.
Puse una rosa roja en su pecho mientras su cuerpo se iba llenando de tierra.
Cuando terminé una nueva oleada me recorrió, era una repleta de odio y venanza.
Corrí lo más rápido que podía, hasta casi parecer que volaba, me alejé del prado consciente de que iba a vengar su muerte, y que, aunque fuera con dolor y tristeza, cumpliría la promesa que me había hecho jurarle: continuar "viviendo" el resto de la oscura, fría y dolorosa eternidad...y ella ya no estaría conmigo...ya no más...








arcoiiza, soy laura, tu hermana del otro foro ja ¿sí sabes cuál no?
o bueno, Lara Diggory, pues.

Lauriña!!
Como no voy a saber quien eres? Si reconozco a la perfección tu forma de escribir.
Me gustó mucho el one, pobrecillo Edward.
A ver si te animas a empezar el fic que me djiste jajaja, que el título molaba.
Te quieroo

Me encanta!!

esta bueno....................este fic..............sigue asi que vas bien